Después de lo de Borriol, el resto de la semana fue un pre-carrera de los novios, preparando equipaje y con muchísimas ganas de irnos.
El domingo salgo un ratillo en bici, por el carril-bici desde el apartamento a Castellón ida y vuelta, Miguel en coche a casa a recoger cosas y yo en bici, a estirar piernas. Una horita en total, bien.
El miércoles decidimos hacer un entrenillo por la pista de la autopista, al terminar de trabajar quedamos en el puente de Montornés y salimos en dirección a Benicassim, poco antes de la sendita de la marcha de verano nos desviamos en dirección a Castillo y subimos un poquillo, de bajada cogemos otra sendita que nos deja en la senda del Bartolo y de nuevo hacia la pista de la autopista, sube y baja y a las antenas de Benicassim. Media vuelta por la pista de la autopista y de nuevo al coche. 1:01´.
El jueves trabajo por la mañana a y a las cuatro de la tarde rumbo a Escarrilla. Casa Marieta nos espera. Llegamos a eso de las ocho y media, dejamos las cosas y nos vamos a cenar al Sarao, hace rasquilla, encima con el airecillo aun da más sensación de frio. Cena y a dormir.
El viernes, nos levantamos con la idea de hacer unos kilometrillos del recorrido de mañana, pensamos dejar el coche en La Sarra, subir un rato andando y de vuelta tomar unas cervecillas o lo que se tercie en La Sarra. Justo llegando a Sallent nos cruzamos con Karmele y Pascual, que ya estaban por aquí también, y como también pensaban patear un rato, se vienen con nosotros.
Pasamos un buen rato, charra que te charra al final nos salen un par de horas largas de paseillo, así que bien nos merecemos una cervecita a la vuelta que nos sabe a gloria. Comemos los cuatro juntos en Escarrilla y nos despedimos hasta mañana.
Por la tarde llega el relevo, Nere y Ruben que están justo delante de nuestro hotel, así que lo tenemos fácil, cenamos con ellos (los del Sarao nos tendrían que dar comisión), y a descansar, que el sábado será largo...
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