IV CURSA FIGUEROLES

Y llegó Figueroles. Pocas ganas, poca motivación, mira que hay días que una tiene más ganas que otros, y este era de esos que no te apetecen mucho, que a todo le ves pegas, que si mucha gente, que si la carrera es muy corta, que si el final mucha pista y yo no soy de correr...en fin, que todo me parecía mal.

Llegamos, y si, mogollón de gente, un poco excesivo, en la salida no podías ni moverte, con lo que agradecí el empezar a correr, aunque apenas se podía andar. Trotando, adelantando y siendo adelantada, llegamos al final de la super-rampa inicial. Primer taponcillo...aquí ya...seguimos, más retenciones, a cada trocito de senda que pillamos, parados. Eso hace que pase un poco de la carrera, me "acomodo" en un ritmito que me va bien, y según Miguel, podría haber hecho algo más...pero bueno, entre que no estaba muy mentalizada y que mis zapatillas empezaban a quejarse otra vez (zapatillas nuevas+abandono de plantillas=dolor planta del pie derecho), pues iba a mi bola. Llegamos arriba en 1:08, dos minutos y medio más que hace dos años, si que he ido tranquila, si...Me pogo las pilas y bajo más decentemente de lo habitual, al principio de la bajada incluso Miguel se sorprende de mi ritmo infernal...solo al principio.

Al llegar abajo ya me toca pararme, y repetir el ritual indio del otro día.

Vamos con Ruben toda la carrera, metros arriba, metros abajo, pero vamos practicamente juntos, y ya en la pista, Miguel empieza con aquello de...que bajamos de dos horas, venga...a mi me da la risa, me recuerda al día del Bartolo por la zona del camping, los tres ahí intentando bajar...poco a poco Ruben se nos va escapando, pero no de mucho, aquí si que voy apretando, voy a lo que puedo y un poquillo más, y al final, entramos en 1:59:24 (1:54:08 en tiempo real, y eso que estábamos cerca de la salida...), por los pelos pero...prueba superada. Lo mejor al entrar, nada más pasar la linea de meta oigo por megafonia que soy la tercera veterana...pegué un grito! Eso si que no me lo esperaba. Hombre, no es que me lo espere nunca, pero aquí, con la cantidad de gente que había, mucho menos, así que me hizo mucha ilu, para que negarlo.

Así que tuvimos que esperarnos, y sufrir las dos horitas de espera, bebiendo cervecitas, comiendo cocas y de charreta con la gente, un patiment la verdad...como había tanta gente, pues también había mucha gente conocida, e incluso un chico al que no veía desde hace, veintipico años...uf! que veterana que soy, va a ser verdad que estoy mayor... En fin, que estuvo bien haber venido a Figueroles después de todo...